En este nuevo episodio de Mindset Emprendedor, Consuelo Chasseing, creadora de For.Me, comparte cómo transformar la intuición en estrategia, los aprendizajes personales en oportunidades de negocio y los desafíos del mundo creator en una nueva forma de hacer marketing.
De una necesidad personal a una industria en transformación
La historia de For.Me no nació de un plan de negocio, sino de una necesidad vital. “En ese momento trabajábamos en corporaciones y veíamos que nadie nos premiaba por los malabares que hacíamos. Todo el reconocimiento estaba asociado a ser exitista, a poder con todo. Y queríamos cambiar eso”, reconoce Chasseing.
Esa búsqueda de equilibrio y autenticidad fue el punto de partida de un proyecto que, con el tiempo, evolucionó hacia algo mucho más grande: una empresa que conecta marcas con personas reales, y que está redefiniendo las reglas del marketing de influencia.
Desde el comienzo, Consuelo entendió que emprender implicaba transformar la incomodidad en oportunidad. No se trataba solo de tener una idea, sino de escuchar lo que faltaba en el mercado y diseñar una solución que realmente resolviera algo. “Muchas veces las ideas nacen de lo que te molesta, de algo que te atraviesa personalmente. Si sabés mirar ahí, encontrás una oportunidad enorme.”
El valor de la autenticidad
Con esa mirada, For.Me apostó por los nano y micro creators, personas con comunidades pequeñas pero genuinas, capaces de generar vínculos de confianza. “Trabajamos con gente que muestra su día a día con naturalidad, que se muestra tal cual es, y que logra un vínculo real con su audiencia.”
Para Consuelo, esa es la clave del marketing actual: no se trata de volumen, sino de conexión. En un contexto donde las audiencias valoran la honestidad por sobre la estética, la autenticidad se volvió un diferencial competitivo.
“El mundo creator vino para quedarse. Cada vez se profesionaliza más, y hoy podés crecer y desarrollarte como un profesional de punta a punta. Lo esencial es que compartas desde un lugar que conecte con el otro.”
Aprender a crecer
El crecimiento también trajo desafíos: “Hay una tensión entre la velocidad a la que se mueven las redes y tu velocidad para crecer como profesional. Por eso, desde For.Me, tratamos de acompañar ese proceso, generar un entorno de formación y contención donde los creators puedan evolucionar sin perder su esencia.”
Con ese propósito, lanzaron For.Me Academy, una plataforma de capacitación para ayudar a los creadores a profesionalizar su marca personal.“El creator es un nanoemprendedor. Necesita luces, sonido, estudio, equipo. Es una pyme de una persona.”
Esa comprensión —dice Consuelo— fue clave para que la empresa creciera: entender que detrás de cada creador hay una persona que necesita estructura, conocimiento y comunidad.
Crecimiento y expansión con propósito
Hoy, la empresa trabaja con marcas y creadores en toda Latinoamérica, con oficinas en Argentina y operaciones en varios mercados de la región. En ese proceso de expansión, Consuelo y su equipo entendieron algo fundamental: para crecer, hay que estar cerca.
“Nos dimos cuenta de que necesitábamos tener una pata en el mercado donde operamos… No podés crecer de verdad si no entendés la dinámica local, las marcas, los tiempos y las personas.”
Esa experiencia reforzó la convicción de que la proximidad y la empatía son claves incluso en negocios tecnológicos. For.Me proyecta seguir creciendo sobre una base clara: combinar tecnología, formación y cercanía humana, potenciando a miles de creadores para que escalen sus proyectos sin perder autenticidad.
La historia de For.Me es también una lección sobre cómo emprender desde la empatía y la observación, sin perder el propósito. “Cuando entendés que tu empresa no solo vende, sino que genera oportunidades para otros, el negocio cobra otro sentido.”
El recorrido de Consuelo Chasseing muestra que la autenticidad, cuando se convierte en modelo de negocio, puede ser un poderoso motor de crecimiento e inspiración para toda una generación de emprendedores.